La policía australiana ha acusado formalmente a una pareja con ciudadanía rusa de espionaje, por intentar enviar información confidencial a Rusia. El comisario de la policía federal, Reece Kershaw, anunció que la mujer, de 40 años y exsoldado del ejército australiano, junto con su esposo de 62 años, fueron detenidos en Brisbane.
Según Kershaw, la mujer, quien trabajaba como técnica de sistemas de información en el ejército, realizó un viaje no declarado a Rusia durante un permiso de larga duración. Durante este tiempo, presuntamente enseñó a su esposo cómo acceder a su cuenta militar desde casa.
La policía sospecha que el esposo obtuvo y envió información militar solicitada por la mujer a las autoridades rusas. El foco de la investigación ahora se centra en determinar si la información realmente fue entregada y qué consecuencias podría tener para la seguridad nacional de Australia.
Ambos acusados han obtenido la ciudadanía australiana en años recientes: la mujer en 2016 y su esposo en 2020. Enfrentan cargos por preparar un delito de espionaje, un delito grave que conlleva una pena máxima de 15 años de prisión.