Ciudad de México, 23 de enero de 2024 – Nuestros gobiernos están comprometidos con abordar los flujos migratorios sin precedentes como una responsabilidad compartida. Para dar seguimiento a la visita de la delegación estadounidense encabezada por el secretario Antony Blinken a México del pasado 27 de diciembre, una delegación de alto nivel de México, encabezada por la secretaria de Relaciones Exteriores Alicia Bárcena, visitó Washington, D.C. para una reunión ministerial el pasado 19 de enero.
En esta reunión nuestros países avanzaron en su compromiso para ampliar las acciones que nos permitan abordar este reto humanitario y de seguridad. Como una parte importante para gestionar los flujos migratorios sin precedentes, el Gobierno de los Estados Unidos ha realizado 79 vuelos de repatriación desde el 1 al 21 de enero a los siguientes países:
Guatemala – 36 vuelos
Honduras – 23 vuelos
El Salvador – 6 vuelos
Colombia – 3 vuelos
Venezuela – 3 vuelos
Ecuador – 2 vuelos
Perú – 2 vuelos
Rumania / India – 1 vuelo
República Dominicana – 1 vuelo
Nicaragua – 1 vuelo
Haití – 1 vuelo
En la reunión de alto nivel abordamos:
El impacto positivo de los esfuerzos para aumentar los controles migratorios en las rutas de autobuses y trenes, el cual ha llevado a la reducción de más de la mitad de los flujos migratorios desde su punto más alto en diciembre.
Tomar medidas enérgicas contra las redes criminales de tráfico de personas
Aumentar las repatriaciones que llegan de manera irregular a nuestros países, tales como los vuelos que ambos gobiernos han realizado a países como Venezuela.
Reconocemos los esfuerzos de México, para desmantelar a las organizaciones criminales trasnacionales que lucran con la necesidad, la salud y las vidas de los migrantes, resaltando:
La desarticulación de al menos 10 de las organizaciones criminales más prolíficas que impactan nuestra frontera compartida.
Entre otros lugares, estas organizaciones criminales operaban en Honduras, Guatemala, El Salvador, Chiapas, Chihuahua, Hidalgo, Veracruz, entre otros.
Avanzar en las vías legales de migración es una tarea compartida en la que colaboramos como una prioridad para alejar las personas del camino doloroso de la migración irregular y los riesgos que representa debido a las organizaciones criminales trasnacionales que lucran con la necesidad de la gente y sus vidas. Mientras hacemos cumplir nuestras leyes migratorias, trabajamos para abordar las causas fundamentales de la migración, por lo que nuestro trabajo con socios regionales resulta crucial para avanzar en esta tarea.
A la par de colaborar con México para gestionar la migración de manera ordenada, segura y humana, desarrollamos la frontera del siglo XXI, es decir, que sea moderna, segura y eficiente. Un ejemplo de ello, fueron las reuniones que mantuvimos entre autoridades estadounidenses y mexicanas para avanzar en la región estratégica de Cali-Baja en la Mesa de Otay II (East).