Más adelante se podrá hablar de si el Canelo Álvarez elige a un rival que esté a su altura en victorias. Por el momento, lo que es una realidad, es que él dictamina con quién exponer sus títulos, porque tan solo con una pelea todos ganan, tanto el campeón como organismos rectores del box, patrocinadores, la sede y el rival.
Cuando Canelo eligió a Edgar Berlanga levantó la duda de por qué no fue a un rival más fuerte. El puertorriqueño aún no ha ganado ningún título mundial, pero es el actual campeón súper mediano WBO NABO desde el año 2021, es siete años más joven y se llevan once años de diferencia respecto al año de debut en el profesionalismo. Además, el Canelo sabe que un fin de semana de noche mexicana se exacerba el patriotismo, el sold out está garantizado y en Las Vegas, los casinos y las apuestas tendrán buenos ingresos.
“Es normal que alguien como Canelo dictamine con quien va a pelear o cómo o dónde, es algo normal, pero en realidad, no debería ser. El box es un deporte que no está altamente regulado, hay cuatro organismos respetados, pero sin uniformidad en cómo trabajan. En condiciones normales debería haber un solo organismo, un solo ranking y el rival del Canelo no lo debería determinar él sino un organismo. El Canelo es la cara del boxeo y el que más vende. Los organismos disputan todos los cinturones de las 168 libras y ganan por cada pelea que haga un campeón”, explica a El Economista, Fernando Barbosa, juez de boxeo, quien forma parte de ESPN KnockOut.
Cuando Berlanga se convirtió en profesional en 2016, Canelo ya era campeón de peso mediano. La diferencia de experiencia es notable pero nada que limite a un enfrentamiento.
Significa todo para mí. toda la gente que está frente a mí me odia y no cree en mí, dicen ‘con quién ha peleado’, pero esa es su opinión; la gente dice que no voy a llegar ni a los 12 rounds», dijo ‘The Chosen One’.
El manager Keith Connolly encabezó las conversaciones en representación de Berlanga para que Canelo realice su octava defensa. En las negociaciones también estuvo en la baraja el empresario saudí Turki Alalshikh, pero no concretó la pelea contra Terence Crawford.
“Históricamente la cara del boxeo siempre tiene el poder de mando y el que vende es el que manda en el deporte, recordemos que además de ser un deporte es una industria. Terence Crawford es un boxeador completo, pero no está entre los cinco que más venden. Por eso, quizá no ha gozado de otros privilegios. Lo del Canelo sí puede ser un poder, tan es así que evitó la pelea con Benavidez. El que vende es el que manda en este deporte.No es nuevo esto del poder de influencia de Canelo Álvarez. La cara del boxeo hace lo que quiere, goza de un poder especial y goza de una posición de privilegio que se ha ganado a través de victorias y golpes, no es que le hayan regalado algo al Canelo Álvarez. Floyd Mayweather tuvo ese rol de mando, lo tuvo Manny Pacquiao, Mike Tyson, Muhammad Ali y Sugar Ray Leonard ”, opinó para este medio Salvador Rodríguez, especialista en boxeo para ESPN.
¿Quién sería un rival retador para el Canelo?
“Hay un peleador que se llama David Benavidez, que está invicto y que precisamente, fue víctima del poder que hace tiempo goza el Canelo, de ser la cara del boxeo. El segundo, es el ganador de la pelea que tendrán el 12 de octubre Dmitry Bivol y Artur Beterbiev. Esa pelea entre dos rusos invictos daría al candidato ideal para una gran guerra contra Canelo”.
José Benavidez Sr., padre y entrenador de David Benavidez, conocido como el ‘Mexican Monster’ criticó al Canelo por su influencia política excesiva en el mundo del pugilismo, que le permite seleccionar a sus oponentes a discreción, con la complicidad de las federaciones de boxeo.
“Hay un Sanctioning Fee de un 3%. Es decir, teóricamente, de lo que vaya a ganar Canelo, el organismo gana un 3%. Las bolsas de Canelo son grandísimas, por ende, tiene mucha palanca para dictaminar lo que quiera hacer. Y los organismos no tienen nada que decir, les va a llegar un cheque grande. En un mundo normal, no debería acontecer, pero para nosotros es normal porque es un deporte altamente no regulado de toda la vida (…) Se le quiere ver al Canelo con el ganador de la pelea entre los rusos. Pero al Canelo, no se le hará fácil subir al semipesado (175 libras), porque ya perdió contra Dmitry Bivol. Canelo tiene 34 años, está en el último tercio de su carrera , él va a aprovechar todo para hacer un buen negocio, es el mejor businessman de la industria. Es un chico que no le huye a nadie, pero es un businessman”, amplía Fernando Barbosa.
El Economista
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