Por Juan Tapia
A propósito del amistoso entre la Selección Mexicana y River Plate, es interesante recordar a los futbolistas que han vestido ambas camisetas. Aunque solo Alberto García Aspe nació en México, la naturalización permitió que jugadores como Carlos “Charro” Lara, Damián Álvarez y Rogelio Funes Mori también representaran al Tri tras su paso por el histórico club argentino.
Carlos “Charro” Lara, nacido en Bahía Blanca, Argentina, en 1934, jugó brevemente para River Plate en 1956 antes de brillar en el fútbol mexicano con Zacatepec. Allí, fue campeón goleador en tres ocasiones y ganó la liga en 1957-58 bajo la dirección de Ignacio Trelles. Con la selección mexicana, destacó en el repechaje rumbo al Mundial de 1962 y en amistosos contra Argentina y Colombia, aunque una lesión lo marginó del torneo mundialista.
Por su parte, Alberto García Aspe, nacido en la Ciudad de México en 1967, llegó a River Plate en 1995 tras consolidarse como figura en Necaxa y la selección mexicana. Su paso fue breve, con solo cinco partidos jugados, y regresó pronto a México, donde continuó su éxito con Necaxa. Como seleccionado nacional, participó en tres Copas del Mundo (1994, 1998 y 2002), siendo un referente del fútbol mexicano.
Damián Álvarez, nacido en Buenos Aires en 1979, debutó con River Plate en 1998 antes de iniciar una exitosa carrera en México con Monarcas Morelia, Pachuca y Tigres. Naturalizado mexicano, jugó algunos partidos con la selección en 2012 y 2013.
Finalmente, Rogelio Funes Mori, nacido en Mendoza en 1991, debutó en River Plate y, tras su llegada al Monterrey en 2015, se convirtió en el máximo goleador histórico del club. Naturalizado mexicano en 2021, fue convocado por Gerardo Martino y participó en el Mundial de Qatar 2022.
Estos futbolistas han forjado un vínculo especial entre River Plate y el fútbol mexicano, demostrando que el talento no conoce fronteras.