Integrantes de la Central Unitaria de Vivienda en Hermosillo cerraron un tramo del bulevar Hidalgo, para exigirle al ayuntamiento en turno, les ayuden con la adquisición de casas abandonadas y sean adquiridas por familias que requieren de un sitio para vivir.
Cesar del Pardo Escalante, dirigente de la Central Unitaria de Vivienda, comentó que el cierre de la vialidad y exactamente por fuera de Palacio Municipal, es para que las autoridades municipales atiendan las peticiones de un poco más de dos mil personas que buscan un sitio para vivir de una forma normal y cumpliendo con el pago de la misma así como de los servicios básicos que ello conlleva.
“El problema de las casas y solares abandonados a creado un problema grave de salud pública y de delincuencia y no es justo que haya miles de familias que no tengan donde vivir. Mientras exista el gran negocio de las viviendas abandonadas, no tienen una idea de los millones de pesos que se sacan con las casas abandonadas porque las agarran en subasta en 60 mil pesos y las venden en 350 mil pesos. Entonces la población debe estar consiente que las casas abandonadas después de todo, es un negocio”, aseguró.
Cesar del Pardo, denunció que Promotora Inmobiliaria dio a conocer en su momento que había unas 300 viviendas abandonas que serían entregadas a personas que requerían de una de ellas, pero después cambiaron de opinión y mejor buscaron la manera de venderlas y sacarle mucho más dinero que apoyar a familias que urgen por tener un lugar seguro para vivir.