En 1984 se celebró la primera edición del Festival Alfonso Ortiz Tirado (FAOT), un espacio dedicado al bel canto y la música culta, inspirado en la vida y legado del médico y cantante sonorense Alfonso Ortiz Tirado. Desde entonces, Radio Sonora ha acompañado este evento transmitiendo su esencia a todo el estado.
El pionero en esta labor fue Armando Moreno Gil, quien relataba:
«puros intelectuales de la Universidad iban a allá y hacían una tertulia, invitaban a un cantante y se pasaban 2, 3 días… empezó a jalar a los gringos y pues ya hubo feria allí porque el pueblo se estaba muriendo de hambre y se levantó… yo me empecé a ir desde el principio para allá».
La cobertura técnica también fue esencial. El ingeniero Guadalupe Gálvez explicaba cómo se enviaba la señal desde Álamos hasta Hermosillo:
«Lo transmitimos a través de la línea telefónica… muy rudimentaria pero muy valiosa esa consola».
El festival se desarrolla cada enero en Álamos, en plena temporada invernal, lo que implicaba retos técnicos y logísticos. Armando Moreno Gil recordaba:
«En el frío y cuando hacía frío de deberás… hasta que logre que fuera la unidad móvil».
En 1991, Sylvia Manríquez y Guadalupe Gálvez fueron designados para cubrir el evento. Ella recuerda con emoción su primera experiencia entrevistando al tenor Humberto Cravioto:
«¿pero cómo?, ¿Qué le voy a preguntar?… muerta de miedo. Pero sacamos la entrevista y cerramos la transmisión».
Durante los años noventa, los equipos eran reducidos por cuestiones presupuestales, aunque se trabajaba con gran profesionalismo. Más adelante, Radio Sonora amplió su presencia en el FAOT con locutores que participaban en las Noches de Gala, como Ramón Valdez, quien compartía conducción con críticos musicales reconocidos:
«Para mí fue algo fascinante convivir con un hombre tan culto, el mejor crítico musical de México».
Con el tiempo, la tecnología facilitó las transmisiones. Gálvez destacaba la llegada de dispositivos portátiles que permitían enlazarse incluso desde la playa, con gran calidad de audio.
Ya en el siglo XXI, nuevas generaciones se integraron a esta cobertura. Alejandra Almada relataba su primera experiencia en 2017:
«No había escuchado de él, sabía que era, jamás había ido a Álamos, muy ilusionada… sabía que era un reto para mí, por eso era como ‘ok, lo tengo que hacer bien’».
El trabajo del equipo de Radio Sonora ha sido intenso y lleno de anécdotas, siempre con el compromiso de llevar la música y la cultura a toda la audiencia. Como señala Almada:
«No dejas de trabajar, no hay un segundo que dejes de trabajar… realmente es un ejercicio cansado, pero muy padre».
Gracias a la labor de profesionales como Armando Moreno Gil, Sylvia Manríquez, Guadalupe Gálvez, Ramón Valdez y Alejandra Almada, la presencia de Radio Sonora en el FAOT se ha consolidado como parte fundamental de la historia cultural del estado.



