La Dirección General de Bebidas Alcohólicas cumple el protocolo de ley para proceder a cancelar, de manera definitiva, licencias cuyos propietarios no han mostrado interés en los más recientes años, de mantenerla, asegura Zaira Fernández Morales.
La responsable de esta área, comentó que ese trámite se puede hacer solo mediante un decreto de la gobernadora del estado y que, por lo regular, históricamente se ha hecho una sola vez por sexenio y en la parte final del mismo, es decir en el quinto o sexto año.
“La historia dice que se hace una cancelación en cada sexenio y generalmente es en el quinto o sexto año y estamos en ese proceso de cancelación de licencias, que deben más de tres o cuatro años al Gobierno del Estado y básicamente es todo un protocolo, debemos hacer tres actas en cierto periodo de tiempo, como inoperantes e inexistentes para poder pasar a una notificación del permisionario dueño de la licencia”, dijo.
Zaira Fernández comentó que en el actual proceso existen alrededor de 400 licencias en esas condiciones, que podrían ser canceladas si es que el propietario, no responde a esa notificación que por ley se le presentará.
Indicó que de ser canceladas esas licencias o un número determinado de las mismas, no necesariamente significa que se podrán entregar nuevas licencia a otros interesados, lo que depende de alguna estrategia a implementar, dado a que actualmente, los estados deben cubrir trámites y nuevas inversiones, con ingresos propios.