Durante más de cinco décadas, el Cinema 70 fue uno de los recintos más emblemáticos de Hermosillo. Aunque muchos creían que el nombre se debía a su apertura en 1970, en realidad hacía referencia a las cintas de 70 milímetros que proyectaba.
El cronista de Hermosillo, Ignacio Lagarda Lagarda, relata que el edificio pertenecía originalmente a la Compañía Operadora de Teatro, una empresa paraestatal del Gobierno Federal que administraba cientos de salas en el país. Fue inaugurado en 1970 por autoridades municipales y el arzobispo Carlos Quintero Arce, con capacidad para 2 mil butacas y una pantalla de gran formato donde se proyectó la película Hello, Dolly! como función inaugural.
“Tenía cuatro tipos de chocolates, manicero, cocolete, capitán y tecolote; esos solamente se vendían en los cines, no se vendían en otra parte. Era una sala tipo auditorio, hacia abajo, con alfombras y grandes cortinas de terciopelo en la orilla de la pantalla”, relató Lagarda.
El cine estrenó películas de gran renombre como El Padrino y Tiburón, además de presentaciones teatrales como José el Soñador, que formaban parte de las caravanas artísticas nacionales. En 1994, tras la venta de la Compañía Operadora de Teatro, Cinema 70 cerró definitivamente sus puertas al público de Hermosillo, con lo que marcó el fin de una etapa de innovación cinematográfica en la entidad.



