Rafael Yari Cabanillas, originario de Sonora y responsable de logística en Médicos Sin Fronteras (MSF), compartió vía telefónica su experiencia en la Franja de Gaza, donde la organización atiende a víctimas del genocidio.
Cabanillas describió la crítica situación humanitaria: heridos por metralla, balas y desnutrición infantil, además de una maternidad colapsada.
“La situación humanitaria es bastante compleja. Aquí en la zona donde estamos nosotros, en el sur de la franja, estamos en el 13% más o menos de la totalidad del territorio. Toda la población se ha comprimido en esta zona, se siente bastante hacinada. Donde uno voltea hay carpas; la gente se ha ido instalando como puede en los lugares que encuentra vacíos, ya muy cerca del mar”, detalló.
Añadió que cuentan con un centro grande de atención a heridos, principalmente por bala, además de áreas de salud mental y apoyo especial para niños con malnutrición.
También narró que, pese al conflicto, cada día se viven historias de desplazamiento forzado, pero también de esperanza, como bodas y nacimientos.
Finalmente, mencionó que prevé regresar a México en las próximas semanas y anhela descansar tras intensas jornadas de trabajo en la zona ocupada de la franja.